La CONFIANZA en uno mismo

La confianza en uno mismo nunca es demasiada. La confianza auténtica en uno mismo es uno de los aspectos peor entendidos del éxito.
No tiene que ver con las probabilidades sino con las posibilidades.
No es la suma de nuestros éxitos pasados, estaríamos en la llamada confianza dependiente, como la de un deportista que depende de la aprobación de su entrenador.
No es un botón que se puede apretar y obtener el éxito, para adquirir el hábito en la creencia de las posibilidades de uno mismo es necesaria una larga y continua práctica en numerosas situaciones.
No mejora por si misma nuestros conocimientos y habilidades, sin los conocimientos o formación adecuados no podemos conseguir un buen resultado aunque intentemos sentirnos muy seguros de nosotros mismos.
No es el fomento de la autoestima, es importante creer en nosotros mismos pero es preferible que esa creencia esté fundamentada sobre alguna habilidad concreta que poseamos.
Una confianza auténtica debe basarse en hechos y soluciones tangibles, elementos sobre los que podemos construir o actuar y direcciones hacia las que estamos decididos a encaminarnos.